viernes, 15 de mayo de 2009

La Segunda Marcha Negra de La Carpa del Diablo


Subscribe Free for future posts  Add this player to my Page

2 comentarios:

PerRo dijo...

Como ya le escribí Don Diablo, siempre terminamos apabullados y atemorizados con nosotros mismos.

Siempre somos nosotros nuestros propios monstruos y siempre , casi por instinto, debemos encontrar un cobijo aún peor, para no sentirnos una lacra frente a nuestro espejo.

La carpa del diablo nos cobija y nos protege... de nosotros mismos.

Saludos y seguiré esperando

L.L. dijo...

Tremendo, no grande, tremendo. Raro, no diferente, raro, y cuando me preguntan desde el otro lado del charco donde vivo "¿Que es la carpa del diablo?, solo respondo:

"Es algo siniestro".